Queridos amigos y familiares:
Cuando anoche terminé de componer la entrada anterior con las refrescantes fotos de Manolo y Pedro, --no sin cierto regusto amargo por la grave situación de mi cuñado Miguel-- dudaba si "pinchar" o no sobre el botón "publicar entrada". Pensé al fin que sería oportuno recordaros a todos (y a mí mismo), precisamente en ese momento, la alegría de vivir que se refleja en ellas.
Tras ver el resultado publicado recibí la mala noticia: "Miguel nos ha dejado".
Una manzana verde y un vaso de buen vino fueron mi cena, y en la larga sobremesa dejé fluir mis pensamientos con un bolígrafo y un folio como postre. El resultado son unos cuantos versos que ofrezco a mi hermana Virginia como invitación a la cordura de expresar los sentimientos, frente a la locura del dolor por lo inexplicable.
Aquí abajo os dejo el enlace
Verba volant, scripta manent